lunes, 15 de julio de 2013

Demasiados Difuntos




Una Asociación dedicada a la recuperación de los restos (que no la memoria, pues nunca fueron olvidados) de los desaparecidos durante la Guerra Civil y la Dictadura en la Provincia de Teruel se centraba en la búsqueda de una fosa común donde fueron enterrados en el tardío 1947 (8 años después de finalizada la Guerra Civil) 24 personas fusiladas, acusadas de colaborar con los “maquis”.

Unos días antes un grupo de guerrilleros había llegado al pueblo y fusilado a ocho personas (entre ellas a tres niños) para vengar la muerte de la mujer de uno de ellos. Me resulta curiosa ésta forma de hacer la Guerra contra la Dictadura, matando civiles y niños en aras de la “lucha por la Libertad”. Otras víctimas olvidadas más.

En toda ésta sinrazón de “a ver quien es más salvaje” la reacción de la Guardia Civil fue del “tres por uno” y detienen a 24 vecinos (entre ellos al Maestro y al Practicante). Después del correspondiente “paso por el Cuartelillo” de Alcalá de la Selva los dividen en dos grupos para “darles un paseo” (los conocedores, saben lo que significa esa frase).

Gracias a las declaraciones de un testigo (entonces adolescente y de adulto senador socialista, además de alcalde durante veinte años) y familiar de alguna de la víctimas, encuentran cuatro cadáveres enterrados en los alrededores de ese pueblo. En la fosa se encontraron casquillos y balas de pequeño calibre, muestras evidentes del tiro de gracia.


Se sabía que otro grupo fue llevado a Mora de Rubielos. Pero allí las noticias de la ubicación de la fosa eran más imprecisas. Se inician las prospecciones por la zona donde los expertos en éstas búsquedas indican que pueden haber inhumaciones, hasta que encuentran una fosa común.


Comienzan los trabajos de exhumación, pero a medida que avanzan comprueban que ni el número de los difuntos, ni las características de los mismos se corresponden a las víctimas de los hechos. Correajes militares y uniformes, balas de fusil...éstos muertos son...... “otros”. En efecto.


Han aparecido otras de las víctimas olvidadas de la tragedia de la Guerra. Para ellos y para el rescate del conocimiento de lo que sucedió; vayan éstas líneas.



Después de luchar durante un mes y en Navidades, casa por casa, a 20 grados bajo cero, con nieve hasta las rodillas y de recuperar para la República la única capital de provincia en toda la Guerra; los combatientes de la 84 brigada Mixta están extenuados y agotados; aunque satisfechos por la victoria obtenida.

Son la mayoría voluntarios socialistas y anarquistas valencianos, procedentes de las Milicias de Valencia y Castellón que han sido encuadrados en unidades formales tras la militarización de las milicias locales o de partido. Todos soldados curtidos, tras haber participado en la toma del Puerto de Escandón el año anterior (donde según el General Vicente Rojo: El Ejército Popular “se sacudió el complejo de inferioridad frente al enemigo”).

Por ello el Alto Mando del Ejercito concede a éstos “Héroes de Teruel” un descanso en retaguardia. Por si no han tenido bastante, el trayecto de 56 kilómetros han de hacerlo a pié, en ese gélido mes de Enero de 1938.Por fin llegan el día 17 a las afueras de Rubielos de Mora. Entre sus Jefes está el nombrado Teniente Coronel Andrés Nieto, ex Alcalde Socialista de Mérida.

Pues bien, no habían transcurrido 48 desde su llegada y lo que llega es una orden: De inmediato, nuevo paseo de vuelta al frente.600 hombres del Primer y Segundo Batallón le dicen a los mandos que los que van a ir van a ser ellos con todos sus antepasados. Inaudito: insubordinación.


Como eran oficiales “populares” provenientes de las Milicias (también “populares”) y con mucho talante, les dicen que no hay problema: El que no quiera pelear que entregue las armas y será enviado a casa, que allí nadie está obligado; pues se alistaron voluntarios.130 soldados aceptan la propuesta y pasan en fila dejando sus fusiles y cartucheras en un montón.


El problema es que se lo creyeron.
 
Andrés Nieto Carmona también se creyó su papel de estricto oficial del ejército prusiano y ordena apresarlos inmediatamente. Y como si estuviera en el frente del Somme ordena un castigo ejemplar: “diezmar” a los detenidos, uno por cada diez de los 600 insubordinados, salen 60 (aunque 14 logran escapar esa noche).Los 46 restantes (31 soldados,12 cabos y 3 sargentos) serán fusilados al amanecer. No hubo Consejo de Guerra, ni se les aplicó el Código de Justicia Militar. Directos al paredón.


Así fue y allí yacen.

A Andrés Nieto la Corporación Municipal de Mérida le dedicó una calle en el año 2008,imagino que por crear el Festival de Teatro en su ciudad. En el discurso de inauguración de la placa con su nombre, el alcalde de entonces proclama que es : “...una referencia moral y vamos a intentar seguir su camino.”.

Espero que solamente sea en la promoción del Arte Dramático.


2 comentarios:

  1. Las guerras son sucias y feas, alguien lo dijo, pero no recuerdo quién.
    Después sólo quedan los hechos heroicos para los libros, todas estas cosas, el miedo, las injusticias, las venganzas, los asesinatos, la miseria, los actos vegonzosos, todo esto cae en un olvido interesado y no sólo eso, sino que a la menor, te cambian el cuento y el que fue un cobarde que se prevalió de su cargo o de se escondió en el anonimato del grupo, es convertido en un martir, en un referente moral, como este del caso que nos traes.
    Esa es la historia que nos cuentan, la de verdad quedó sepultada bajo el frío y la nieve.

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  2. Gracias por seguir el Blog.Precioso y atinado ; a mi juicio; tu comentario. Tristemente es así.

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